El ex gobernador y presidente de la Cámara se molestó por el diálogo directo de Cristina Kirchner y el senador Maurice Closs. Una diputada y una senadora renovadoras no estuvieron en la votación de la emergencia. En el gobierno preocupa que se frustren leyes por la puja política.
BUENOS AIRES. En el gobierno nacional que encabeza Alberto Fernández ven con preocupación la interna abierta y cada vez más explícita entre el senador Maurice Closs y el presidente de la Legislatura, Carlos Rovira, que se tradujo en dos “faltazos” durante la votación de la ley ómnibus de la Emergencia Pública.
Según una publicación del medio especializado, LPO, las misteriosas ausencias de las legisladoras roviristas Magdalena Solari en el Senado y Flavia Morales en Diputados, tienen que ver con el enojo que provocó al conductor de la Renovación, el diálogo directo de Closs con la presidenta del Senado, Cristina Kirchner.
Las ausencias tuvieron sus excusas para quien quisiera entenderlas. Morales afirmó que tenía un viaje planeado con su familia y la senadora Solari Quintana sufrió un accidente doméstico, que le impide viajar al Senado. Curiosamente, la ex titular de la Sociedad del Conocimiento, sí estuvo en la Legislatura provincial para aplaudir a Rovira, reelecto presidente de la Cámara por 13º año consecutivo.
Misteriosas ausencias en el Senado y el acuerdo Closs – CFK
Solari Quintana no figura en ningún bloque de los identificados en la página web del Senado que preside Cristina Kirchner, porque no presentó el suyo ni se sumó al Frente de Todos, como sí lo hizo Closs. De hecho, justamente, el pase del ex gobernador al bloque del oficialismo del Frente de Todos, sin consultar a la cúpula partidaria, fue lo que molestó al conductor de la Renovación.
Como es de público conocimiento, Closs se reunió con Cristina en Noviembre y pidió presidir la Comisión de Presupuesto. No lo consiguió pero obtuvo la vicepresidencia primera del Senado. Esto derivó en su pase al oficialismo kirchnerista, para malestar de la cúpula del partido “misionerista” que incluso, habría lo habría suspendido como miembro del frente que gobierna Misiones desde 2003.
“Es falso que va a ser sancionado, pero el ingeniero no soporta que alguien lo desafíe y reaccionó. Es sólo eso”, confió una fuente del FR al citado medio.
¿Se podría frustrar el nombramiento de Refecas?
Sin embargo, resulta evidente que la relación actual de Closs y Rovira no es la mejor y en el gobierno nacional temen que este distanciamiento afecte a los votos que necesita el oficialismo en futuras votaciones. De hecho, la ausencia de Flavia Morales pudo ser crucial en la votación de algunos artículos en particular que se aprobaron con lo justo.
De igual manera, en el Senado, Cristina podría haber sufrido la banca vacía de Solari Quintana si la UCR la desafiaba a juntar los dos tercios por su cuenta para aprobar la ley el viernes.
En el corto plazo, Cristina Kirchner y el FdT necesitan de los dos tercios para aprobar el pliego de Daniel Rafecas como procurador general. Si Solari Quintana viaja y está presente en esa sesión, por estas horas, sólo lo saben en la mesa chica de la Renovación.