Una noticia tras otra de una magnitud tan grande que son más que una bomba, se produjeron en lo que corre de la presente semana. Las dos también causan un asombro tan marcado a toda la opinión pública, que merecen estos breves comentarios. En orden de importancia, pero muy cercanas ambas veremos al senador Maurice Closs y al ministro de Energía Provincial tramitando espacios en la iluminada ciudad de Buenos Aires, capital de la República, pero con los pies de su poder asentado en Misiones.
La novedad en torno del senador Closs es que abandonó, sin dar explicaciones públicas, al bloque “misionerista” en el Senado de la Nación, para saltar al del Frente de Todos. El hecho ocurrió este día miércoles en el Congreso Nacional, abandonando a la senadora Maggi Solari con quien estaba en el espacio desde el cual sustentaron la defensa de los intereses de todos los misioneros, que fueron en definitiva quienes los votaron con ese objetivo. El alejamiento del misionerismo por parte del senador Maurice Closs, dejó al bloque en condición de unipersonal, ocupándolo Maggi Solari,
quien rechazó irse al Frente de Todos, entendiendo que fue elegida con ese objetivo. Muchos esfuerzos se realizaron en el orden nacional para que la dirigente renovadora siga a Closs, un hombre que en su momento supo ocupar un espacio de relevancia tanto en la puesta de la piedra fundacional como en el tránsito de sus primeros tiempos de la Renovación, aunque poniendo distancia con algunas acciones que fueron necesarias, por disidencias de carácter personal en algunos casos. Ahora este “pase” al bloque del Frente de Todos pone serios interrogantes respecto de la profundidad de su decisión. Fuentes muy cercanas al senador Closs señalaron que realiza un repliegue “táctico” de la Renovación, pero su posicionamiento no significa un alejamiento de la Renovación, sino aprovechar la coyuntura política nacional que le brinda Cristina Fernández de Kirchner por estos días, que le permitió situarse en un sitial de preferencia en el Congreso Nacional. Quienes mostraron mucha preocupación por el “minué” que ejecuta el hombre fuerte de los Radicales Renovadores, son aquellos compañeros de ruta desde hace bastante tiempo, que ocupan cargos de importancia en el Poder Ejecutivo de Misiones, que se sienten vacíos de contención por momentos. Hombres como el Secretario de Hacienda, con contactos directos, casi diarios, con dirigentes políticos de enorme cercanía con Closs, veía dificultado por momentos asumir y justificar la actitud de su referente máximo en la Renovación, Maurice Closs.
Otro dirigente misionero que por estos días batalla por un puesto nacional conjuntamente con Maurice Closs, es el ministro de Energía Provincial, Sergio Lanziani. Pero parece que no con la misma suerte. Es que el ingeniero Lanziani quien fue muy nombrado por la prensa como número puesto para ocupar un ministerio nacional, repentinamente entró a un cono de sombras mediático y a horas de conocerse el Gabinete nacional definitivo, su apellido no figura entre los aspirantes potenciales que con fuerza maneja la prensa. Pero es sabido que eso muchas veces sucede y finalmente se logran los éxitos.Pero donde sí está teniendo logros es en una extraña ejecución hipotecaria que está realizando él como actor, pero aquí se presenta lo sorprendente: sobre una propiedad que es de su propiedad, conforme lo determina el edicto de remate del día de hoy. Pero, donde para sorpresa de muchos interesados compradores que no conocen la cuestión, se omite el nombre y apellido del ejecutante hipotecario que sería el mismo Lanziani. Sobre la propiedad que se remata, existiría como mejora una fábrica en construcción propiedad de un Ente provincial. Estas circunstancias rodean el remate de la fecha.
EDICTO
En Buenos Aires en tanto los diputados nacionales Renovadores Sartori, Flavia Morales y Ricardo Wellbach, surgidos del voto de los misioneros, mantuvieron su independencia de las fuerzas nacionales, consolidándose como “misionerista” desde donde tendrán más posibilidades de bregar por el bienestar de todos los misioneros, a la hora de la distribución de los recursos provenientes del Presupuesto Nacional, que se debate en el Congreso Nacional.